
El malestar que no tiene nombre
El malestar que no tiene nombre. Así es como Betty Friedan definió esa sensación que nos invade y no sabemos qué es ni por qué. Aunque su obra tiene ya unos cuantos años es de rigurosa actualidad. Vivir aquejadas de males que no se sabe de donde proceden… pero las estadísticas ya señalan a las mujeres como las consumidoras del 80% de los ansiolíticos en el mundo. ¿Acaso nos aqueja un mal propio? ¿O es que tantas preocupaciones tenemos? Y, ¿por qué tantas preocupaciones?
La mística de la feminidad
Betty Friedan
Con el libro La mística de la feminidad, su autora Betty Friedan ganó el premio Pulitzer en 1964 con esta obra que trata “el malestar que no tiene nombre”, que según las investigaciones que realizó Friedan, aquejaba a las mujeres estadounidenses de clase media y que la autora identifica con “la mística de la feminidad”. Este tema también se trata de manera breve en el libro Feminismo para principiantes de Nuria Varela.
Describe el período de los años 50 en el que el modelo educativo postguerra mundial se dirigía a que las mujeres decidieran elegir la opción de regresar al hogar después de haber conquistado el derecho al voto y a la educación y de haber accedido a un empleo. La expresión mística de la feminidad, según su autora, se emplea para describir un conglomerado de discursos y presupuestos tradicionales acerca de la feminidad que obstaculiza el compromiso intelectual y la participación activa de las mujeres en su sociedad. Sin independencia económica, el modo de vida del ama de casa en ese nuevo hogar tecnificado, produce soledad, depresión y otros cuadros médicos calificados como “típicamente femeninos”.
Analiza el sistema económico en el que se vende a las mujeres una identidad acorde con la unidad familiar de consumo en que se ha transformado la familia. La mistica de la feminidad fue el libro que sirvió de punto de arranque del feminismo de los años 70, marcó el final del interregno y de la mística femenina.
Betty Friedan
Betty Naomi Goldstein, (Peoria, Illinois, 1921 – Washington, 2006), mejor conocida como Betty Friedan fue una reconocida escritora, autora de La mística de la feminidad (1963), entre otras obras, obra de referencia del movimiento feminista, por la que fue galardonada con el premio Pulitzer. Mujer adelantada a su tiempo, nunca bajó la guardia en los problemas que siempre la preocuparon: la reestructuración de lo doméstico y familiar y la paridad económica y laboral entre hombres y mujeres, dos frentes en los que abrió brecha y que la convirtieron en la figura más emblemática del feminismo en una época, en la década de 1960, en la que todo estaba por hacer. En este sentido, esta pionera de los derechos de las mujeres será recordada como una de las activistas que más han contribuido a trazar un camino hacia la igualdad real de géneros.