Más de 200 millones de niñas y mujeres mutiladas
La Mutilación Genital Femenina es una práctica inhumana que actualmente afecta a muchas niñas y mujeres vivas. Son más de 200 millones de niñas y mujeres mutiladas en el mundo. Amparándose en la tradición millones de mujeres son mutiladas y asesinadas cada año.
Como mujeres, como personas, como seres humanos tenemos el derecho a la vida, a una vida digna, a una vida sin mutilación.
En el Día Internacional de la Lucha contra la Mutilación Genital Femenina queremos volver a gritar ¡Basta ya!
“Con la práctica de la mutilación genital femenina no solo se provocan unos daños físicos irreparables, también unas cicatrices emocionales de por vida.”
Qué es la mutilación genital femenina
La mutilación genital femenina es la extirpación del sexo de la niña, y por tanto, la extirpación de su ser como persona, ya que nunca más será la misma y quedará marcada con el sufrimiento de por vida.
Debemos saber que existen cuatro tipos fundamentales de mutilación genital femenina:
- Clitoridectomía: resección parcial o total del clítoris (órgano pequeño, sensible y eréctil de los genitales femeninos) y, en casos muy infrecuentes, solo del prepucio (pliegue de piel que rodea el clítoris).
- Excisión: resección parcial o total del clítoris y los labios menores, con o sin excisión de los labios mayores.
- Infibulación: estrechamiento de la abertura vaginal para crear un sello mediante el corte y la recolocación de los labios menores o mayores, con o sin resección del clítoris.
- Otros: todos los demás procedimientos lesivos de los genitales externos con fines no médicos, tales como la perforación, incisión, raspado o cauterización de la zona genital.
A pesar de los grandes esfuerzos que desde las asociaciones de mujeres y desde los organismos internacionales se hacen para acabar con esta práctica, la mutilación genital femenina de niñas sigue siendo una cruel realidad en los 29 países donde actualmente se practica.
Renovadas esperanzas
En agosto de 2016, hace apenas unos meses, toda la prensa nacional e internacional se hizo eco de la esperanzadora noticia que el Parlamento Panafricano hacía pública.
El máximo órgano legislativo de la Unión Africana ha aprobado la prohibición de la mutilación genital femenina en sus 50 estados miembros. Después de más de tres años de negociaciones entre asociaciones locales e internacionales y las propias comunidades, el pacto culmina con la firma de los 250 diputados y diputadas.
Tras alcanzar el acuerdo comienza la tarea más difícil para diputadas y diputados: trasladar a sus países la decisión y trabajar para que se cumpla esta prohibición. Esto no es nada fácil ya que es muy complejo llegar a algunas zonas rurales donde la autoridad está basada en la tradición.
La mutilación genital femenina forma parte de una cruel pero arraigada tradición, favorecida por las sociedades patriarcales que ven el cuerpo de las mujeres tan solo como un recipiente que fecundar o un objeto sexual destinado al placer del hombre.
Lucha conjunta y concienciación global
Es necesaria la lucha conjunta y la concienciación de los daños físicos y emocionales que la MGF femenina provocan en las niñas para poder acabar con ella. Si no se trabaja conjuntamente existe el riesgo de que suceda como en Guinea donde la MGF está prohibida pero la tasa de prevalencia es de más del 90%. A pesar de que se han aprobado leyes que prohíben la MGF no hay mecanismos efectivos para acabar con esta práctica.
El presidente del Parlamento, Roger Dang, hacía mención a los hombres y la necesidad de su implicación en esta lucha. “Nuestra responsabilidad es doble a la hora de defender a las mujeres contra esta flagrante violación de los Derechos Humanos“.
Son muchas las incógnitas que todavía tenemos sobre este nuevo pacto contra la mutilación genital femenina. ¿Cuáles son los objetivos? ¿Qué fechas proponen para una erradicación total?
Poco se ha explicado, todavía, sobre cómo se va a llevar a cabo este pacto de forma concreta. Pero la noticia nos hace andar un pasito más en este largo camino. Como mujeres, como personas, aplaudimos todas las medidas para acabar con la violencia contra las mujeres.
Aunque no descansaremos hasta que la cifra de niñas en riesgo de sufrir una mutilación genital femenina sea cero. Celebramos este nuevo pacto en el continente africano sin olvidar que en el mundo todavía muchas mujeres siguen siendo desposeídas de sus cuerpos, mutiladas y asesinadas. En el continente asiático miles de niñas y mujeres siguen siendo mutiladas con la aprobación de las autoridades.
El derecho a la sexualidad
La mutilación genital femenina también atenta contra los derechos de reproducción y sexuales de todas las mujeres. Todas nosotras tenemos derecho a disfrutar en las relaciones sexuales o con nosotras mismas.
La mutilación genital femenina convierte a las niñas y las mujeres en meros objetos destinados al placer masculino. Recipientes que fecundar, cuerpos que poseer.
La violencia contra las mujeres quiere privarnos del derecho al placer, convertirnos en mujeres sumisas. Debemos luchar contra los argumentos arcaicos, religiosos o tradicionales que entienden a la mujer como un ser que debe ser purificado y privado del goce.
¡Basta ya! #stopMGF
Referencias:
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Mutilación genital femenina
La mutilación genital femenina no sólo extirpa el sexo de la mujer, sino también una parte del cerebro que hace de ella una mujer sumisa, porque cuando una niña es mutilada se están vulnerando sus derechos y eso la acompaña a lo largo de toda su vida.
Mutilación Genital Femenina o Extirpación del Ser
El cine siempre nos permite poder salir de nuestro ombligo y ver la realidad que afectan a otras mujeres que nacieron en el lugar erróneo en el momento inoportuno donde el patriarcado es letal.