Abrazamos a las personas porque estamos felices, tristes o tratamos de consolarlas. Abrazar es una muestra de afecto que nos hace sentir bien universalmente así como las caricias y los susurros. Además, resulta que científicamente está comprobado que los abrazos nos hacen más saludables y felices ya que los beneficios y el poder de los abrazos va más allá de ese sentimiento agradable que nos recorre por el cuerpo al abrazar a alguien.

7 beneficios de los abrazos

Reducen el estrés: Cuando una amistad o un familiar lo está pasando mal muchas personas solemos  abrazarlas o acariciarlas en señal de apoyo. Según un estudio del departamento de psicología de la Universidad de California, se ha demostrado que abrazar o mantener contacto físico con otra persona ayuda a reducir el estrés de la persona que lo está pasando mal.

Los abrazos te pueden proteger de las enfermedades: el efecto de reducción del estrés de los abrazos puede también ayudarnos a estar más sanas y a no contraer enfermedades.

En un estudio de 400 personas el equipo investigador descubrió que abrazar reduce la posibilidad de caer enferma. Las personas participantes del estudio mostraron un mejor sistema de apoyo impidiendo que enfermasen o teniendo menos probabilidad. Aquellas personas que acabaron enfermas a pesar de ello demostraron tener síntomas más leves que las personas que no habían sido abrazadas.

Los abrazos potencian la salud de nuestro corazón: Abrazar puede ser bueno para la salud de nuestros corazones. En un estudio del departamento de psiquiatría de la Universidad de California con parejas como pacientes se demostró que coger de la mano y abrazar reduce la presión de la sangre y el latido de nuestro corazón. Por lo tanto, según ese estudio las relaciones afectivas que incluyan abrazos son buenas para tu corazón.

Los abrazos te pueden hacer feliz:  La oxitocina es una hormona,  elemento químico en nuestros cuerpos que a veces la ciencia la ha llamado como “la hormona de los abrazos o caricias.” Esto se debe a que los niveles de Oxitocina suben cuando nos abrazamos, acariciamos o nos sentamos cerca de alguien. La oxitocina está relacionada con la felicidad y con menos estrés. Las personas que se dedican a la ciencia ya han comentado varios veces que la oxitocina tiene un mayor efecto en las mujeres. ¿Y qué hace la Oxitocina? La Oxitocina causa una reducción de la presión de la sangre y de la hormona del estrés noradrenalina

Otro estudio destaca que los beneficios positivos de la Oxitocina son mayores en mujeres que han tenido mejores relaciones afectivas con abrazos ya sea con su pareja o con su hijo o hija.

Abrazar también aumenta los niveles de Serotonina, una de las hormonas de la felicidad porque nos hace sentirnos  personas felices, relajadas y seguras. También actúa como controlador del apetito y de nuestro estado de ánimo.  Algunos problemas de salud como la depresión y la obesidad han sido relacionados con un desequilibrio en los niveles de serotonina. Niveles bajos de serotonina pueden producir problemas para conciliar y con obesidad puesto que el cerebro cree que tiene hambre cuando esto ocurre. Una vez los niveles de serotonina se normalizan, el deseo de comer desaparece.

Muchos antidepresivos del mercado están basados en el incremento de la producción de serotonina al igual que estos alimentos para la felicidad. Pero abrazar es otra manera sana y más barata de aumentar nuestra felicidad con un efecto inmediato.

Los abrazos pueden reducir tu miedo y el dolor: Como ya hemos comentado el contacto físico reduce la ansiedad en personas con baja autoestima. Las caricias y los abrazos incluso a objetos inanimados como peluches pueden reducir el miedo.

Por otro lado, otras investigaciones sugieren que algunos tipos de contacto o formas de afecto ya sean caricias, coger de la mano o abrazar reducen el dolor. En un estudio, pacientes con fibromialgia tuvieron seis tipos de tratamientos de contactos. Cada tratamiento consistía en tocar levemente la piel. Las personas participantes indicaron una mejora de la calidad de vida y de disminución del dolor.

Los abrazos mejoran la comunicación: La mayoría de la comunicación humana ocurre verbalmente o a través de expresiones faciales pero el contacto es otra importante manera de mandar mensajes a las personas. La ciencia demostró que podemos comunicar emociones (rabia, ira, amor, gratitud, tristeza, felicidad) tocando a la gente y se trata de una comunicación más íntima y afectiva. Un estudio de la Universidad Carnegie Mellon afirma que abrazarse es una buena manera de resolver un conflicto con una amistad o pareja pues refuerza las emociones positivas.

Los abrazos complementan una crianza sana: Los abrazos son una parte vital del desarrollo y del apego de los infantes según la neurobiologa Mary Carlson que estudió los efectos a largo plazo de los y las bebés que no tuvieron afecto en los orfanatos de Rumanía entre 1970 y 1980. Mary Carlson decía que la falta de atención y afecto atrofió el crecimiento de los y las huérfanas y esto influyó en su comportamiento adulto. En otro estudio diferente en ratas se demostró que la falta de cariños de las madres provocaba que tuvieran mayores niveles de estrés en la vida adulta.

Los abrazos y los mimos, incluso los apretones de afecto, los masajes y dormir en los brazos o regazo de un progenitor tienen un efecto maravilloso en los infantes. Todos estos momentos compartidos con los progenitores activan los opioides y la oxitocina en el cerebro infantil.  

La importancia del contacto físico

¿De dónde viene la necesidad de contacto? De los simios y primates que crean y mantienen su amistad a través del aseo social. Esta actividad consiste en remover porquería de la piel y el pelo y su gran efectividad proviene de la caricia que se produce al realizar esta tarea. Hoy en día las personas también realizamos esta actividad cuando acariciamos la cabeza de alguien en señal de afecto o sin ir más lejos, cuando vamos a la peluquería mucha gente se relaja por todas las caricias recibidas en el cuero cabelludo. De hecho, es por ello que están de moda los audios en 3D, binaurales o ASMR porque simulan la cercanía y las caricias engañando al cerebro para pensar que las recibe realmente.

Las caricias lentas involucradas en el aseo o peinado estimulan un conjunto particular de nervios: las neuronas aferentes c-táctiles que se encuentran solo en la piel con vello (que tiene folículos pilosos)  y son bastante diferentes a los nervios habituales que transmiten información sobre el tacto, el dolor y la presión. Estas neuronas responden solo a los movimientos ligeros y lentos. Tienen una ruta directa hacia el cerebro, donde provocan la liberación de endorfinas. Las endorfinas forman parte del sistema de control del dolor y producen un efecto parecido a los analgesicos. De hecho, químicamente se parecen a las drogas como la morfina pero se diferencia en dos aspectos clave: son 30 veces más efectivas que los analgesicos y no nos volvemos adictas a ellas.

Curiosidades sobre los abrazos

El poder de las caricias, el contacto y los abrazos y sus beneficios también se puede apreciar en la cultura lingüística. Darse la paz se hace estrechando la mano y Hugging it out en inglés es una expresión que se usa para resolver una discusión o mostrar afecto.

De hecho, un grupo de europeos lanzó la campaña #hugabrit para intentar convencer a Reino Unido que no se fuera de Europa. En esta campaña subían fotos abrazando a personas británicas para demostrarles su cariño.

#British people go #VoteRemain today! 🇬🇧🇪🇺🗳💙💛 #HugABrit #VoteRemain #Brexit #Bremain #StrongerIn #EU #europe #euref pic.twitter.com/KnYjHXMJ76

— Marina L. (@marinalepine) 23 de junio de 2016

En otros países como Japón tienen los Soineya, es decir cafés especializados que ofrecen entre sus servicios un abrazo de veinte minutos

También existe un movimiento global de abrazos gratis que surgió gracias a un australiano que se sentía solo pero gracias a un abrazo de una desconocida comenzó a sentirse mejor, repartió abrazos gratuitos e inspiró a más personas a realizar este movimiento de FREE HUGS (Abrazos gratis)

En Euskadi el 5 de mayo la Caravana Abriendo Fronteras y Ongi Etorri Errefuxiatuak han convocado una movilización europea llamada Herrien Besarkada. El abrazo de las personas, los pueblos y los derechos humanos. Un abrazo simbólico que tendrá lugar el 5 de mayo de 2019 a las 12:00 en ciudades y pueblos de toda Europa. Este abrazo representará la solidaridad, la acogida y la libre circulación de las personas.

🍥Maiatzaren 5ean #GizaEskubide-en alde besarkatuko gara #Durango-n#M5 #besarkada #BesarkaGaitezen

🍥El 5 de Mayo nos abrazamos a favor de los #DerechosHumanos en #Durango #5M #Abrazada #Abrazada5M pic.twitter.com/qUWBND05zH

— PlataformaOEEDurango (@errefuxiatuakDu) 23 de abril de 2019

¿Cuántos abrazos necesitamos?

La psicoterapeuta Virginia Satir comentó una vez que necesitamos 4 abrazos al día para sobrevivir, 8 para mantenernos, 12 al día para crecer. Entonces ¿Cuántos abrazos deberíamos recibir al día para mejorar nuestra salud? Puede que suenen demasiados pero como se suele decir mejor que sobren que falten.

La ciencia ha demostrado que abrazarse regularmente con aquellas personas cercanas a ti, aunque sean abrazos cortos, puede tener un impacto positivo en nuestro cerebro y cuerpo.

Así que si te quieres sentir mejor, reducir tu estrés y ansiedad, mejorar tu comunicación y ser más feliz y tener mejor salud, pedir y recibir abrazos es un buen punto de partida.

A la frase una manzana al día da salud y alegría, debería añadirse que un abrazo también.

¿No te gustan los abrazos?

No a todo el mundo le gusta abrazar o ser abrazado o no le es tan natural. De hecho, en algunos países como Estados Unidos o Reino Unido parecen tener un miedo cultural a abrazar. Pero no hay que tenerle miedo, abrazar y el contacto humano en forma de caricias o de coger la mano son comportamientos instintivos en la infancia, de hecho, es una parte esencial es el desarrollo sano de la inteligencia emocional y del desarrollo físico.   Así que os invitamos a dejar de pensar que solo son para los y las más pequeñas ya que los beneficios como hemos podido ver, son demasiado buenos como para perderlos. La próxima vez que veas una oportunidad de abrazar o recibir un abrazo, hazlo porque tú y tus personas más cercanas se lo merecen.